Ruta por los Molinos de Vilameá y sus dos puentes molones

Volvemos al Concello de Lobios para hacer una ruta chula, de esas que tanto nos gustan 😊. Si te molan los molinos tanto como a nosotros, estás de enhorabuena, porque te llevamos de ruta por los Molinos de Vilameá. Un conjunto de lo más chulo que se completa con dos puentes y un rinconcito de 10 para darte un bañito 🔟. Si es que lo tiene todo. ¿Estás ready para disfrutarlo? 😎

¿Dónde están los Molinos de Vilameá?

Los Molinos de Vilameá están en el Parque Natural de Baixa Limia-Xurés 🏞️, en el Concello de Lobios. Ten cuidado y no te vayas al primer sitio que sale si buscas Vilameá en Google Maps porque te llevará a otro sitio que está cerca de Allariz y está a unos cuantos kilómetros de distancia 🤭.

¿Cuántos molinos se ven en la ruta de los Molinos de Vilameá?

En total te vas a encontrar 12 molinos. ¡Alucina, vecina! 😮 Todos rehabilitados. Algunos de ellos tienen hasta las piedras de moler dentro ⚙️, para que puedas ver cómo era su maquinaria. Es un sitio de lo más chulo para disfrutar de la naturaleza mientras aprendemos más cositas sobre las actividades tradicionales de la zona 🔝.

Empezamos la ruta por los Molinos de Vilameá

Vale que sí, que ya te los enseñamos. No te preocupes que no son nada tímidos y te los vas a ir encontrando a tu paso 👋. En total, la ruta es de 1,7 kilómetros. Además, es de dificultad baja, así que es una ruta ideal para hacer con los peques de la casa. Tardarás unos 45 minutos en hacerla ⌚, dependiendo del tiempo que te pares a hacer fotos, claro.

¡Ah! Y es circular, así que puedes ir por el margen derecho del río o por el izquierdo. Nosotros decidimos empezar por el margen izquierdo del río 👈, que es el que tiene más molinos, pero puedes hacerlo al revés si te mola más.

1. Saluda al Molino del Puente Nuevo, el Muiño da Ponte Nova

El primer molino que saldrá a tu paso es el Muiño da Ponte Nova. Seguro que se llama así porque está supercerquita de un puente de lo más chulo 😊. Lo han restaurado y puesto guapete para que cuando te acerques a verlo te guste más.

Fíjate bien en el Muiño da Ponte Nova porque además del edificio en sí, también han restaurado el sistema de canalización que hacía posible que funcionara el molino 💧.

Por esta cañería que tenemos detrás pasaba el agua al molino y hacía girar la rueda para moler el grano y convertirlo en harina. ¡Estaba todo pensado! 🧠

Otro huequecito curioso es la especie de mesa que puedes ver delante del molino. La piedra grande redonda no es una mesa amigui, es una rueda de molino.

En realidad este molino forma parte de los 5 molinos que están en el margen derecho del río, pero como nos lo hemos encontrado de camino, pues nos hemos parado ya a verlo 👀.

2. Cruza el puente… ¿romano?

Nada más pasar el Molino da Ponte Nova llegarás al puente que le ha dado nombre. En algunos sitios hemos leído que es un puente romano pero no lo es, amigui. Aquí sí que hubo un puente romano, un poco más adelante, a la altura del Molino de Laixiña, pero no ha llegado hasta nuestros días. Era uno de los puentes que formaban parte del trazado de la calzada romana de la Via Nova 👌.

Aquí es donde tienes que decidir si cruzas el río y vas por la margen izquierda o si decides seguir por la derecha 🤔. Nosotros cruzamos, jeje, que nos flipa cruzar puentes de piedra.

3. Sigue y verás más molinos

Nada más pasar el puente nos encontramos con otros molinos que no parece que estén tan restaurados como el que acabamos de ver. Pero también tiene su encanto verlos así. ¿No crees? 😊

Pasamos el Molino de Pé de Luz y el de Laixiña y seguimos nuestra ruta siguiendo el trazado de A Levada 🚶.

Por si no lo sabes, A Levada es el canal de agua que alimentaba los molinos 💦. Así que sí, por aquí pasaba el agua, amigui.

4. El Muiño da Sela y su hermanito Sela II

Si sigues el canal del agua llegarás a otro molino chulo, el de la Sela. Sabemos que se llama así  porque le vimos el cartelito, no te vayas a creer que somos unos expertos descubridores de molinos, jeje 😜.

Es otro de los molinos en los que puedes ver la piedra que se usaba para moler. Si te fijas estaba un poco asomadita a la puerta 🚪, diciéndonos, “venga Minions, pasad a saludarme”. Y un poquito más adelante, mira con qué rinconcito chulo nos encontramos. Es el Molino da Sela II, que este tiene un hermanito 🤩.

Una de las cosas que más nos gusto de la ruta por los Molinos de Vilameá es que nos pudimos meter dentro de ellos y cotillear jeje 👀.

5. Los molinos do Cubo de Baixo, Cubo do Meo y do Cubo de Riba

Ahora viene otro grupo de molinos que son familia. Uno era el Molino del Cubo de Abajo, otro el del Cubo del Medio y otro el Molino del Cubo de Arriba 🤭. Lo que no hemos conseguido descubrir es dónde estaban los cubos 🔎. Si los encuentras cuando hagas la ruta de los Molinos de Vilameá, ¡avisa! Nos lo puedes contar en comentarios, que nos encanta leerte 😊.

Y después de cotillear el de abajo, nos fuimos pasito a pasito a saludar al Molino del Cubo del Medio y acabamos con el de Arriba. ¡Hola, señor molinoooo! 👋

6. Desde la ruta de los Molinos de Vilameá también puedes visitar una albariza

En la mitad de la ruta te encontrarás esta señal que te indica que puedes ir hasta una albariza ➡️. Por si no lo sabes, una albariza es una construcción rural que rodeaba las colmenas con un gran muro de piedra 🐝. Lo hacían para protegerlas de los ataques de los animales de la zona 🐻.

Nosotros habíamos leído que la ruta se complicaba un poco, así que decidimos no ir hasta ella, aunque solo está a 450 metros. Pero si vas y merece la pena, ¡cuéntanoslo en comentarios! 😜

7. Sigue la ruta por los Molinos de Vilameá, que en nada llegas al puente de madera

Venga amigui, que ya hemos llegado a la mitad de la ruta. Estamos a unos metros de un puente de madera de lo más molón. El camino antes de llegar al puente se complica un pelín, pero casi nada. Solo que tienes que subir por unas piedras, pero si no tienes las patitas tan cortas como nosotros, no hace falta que des saltos voladores para ir de piedra en piedra 🤭. Eso ya lo hacemos nosotros.

Y ahora sííí. ¡Hemos llegado al puente de madera! ¿Has visto qué chulo que es? 😍

Pues ahora solo queda cruzarlo para continuar la ruta de los Molinos de Vilameá por el otro margen del río. ¡Venga! ¡Que todavía nos quedan 5 molinos! ¡A mover ese culito! 1, 2, 1, 2…

#MiniOnTip: No pases por el puente como un caballo mirando solo al frente. Te recomendamos que mires a los dos lados, porque vas a flipar en colorines con el paisaje. ¡Mira cómo mola! 😊

8. El Muiño Novo y sus amiguis del margen derecho del río

Muy cerquita del puente nos encontramos con otro grupito de 3 molinos. El Molino da Fulgueira de Riba, el Muiño da Fulgueira do Medio y… ¿la de abajo? ¡Pues no! ¡El Molino Nuevo, jiji! El primero que verás, al lado izquierdo del puente de madera, es el Molino de Fulgueira de Riba, al lado derecho está el de Fulgueira do Medio 😊.

Lo que nos llamó la atención de estos molinos es que algunos de ellos tenían el techo de piedra. ¿Te has fijado en la foto? 👁️ El siguiente molino que nos encontramos es el Molino Nuevo.

9. Las pozas del río Vilameá

En este lado del río nos encontramos con unas pozas que molan lo suyo 🏞️. Sus aguas cristalinas nos estaban llamando a gritos para que nos diéramos un bañito. Y seguro que a ti te hacen lo mismo. Así que si vas un día de calorcito, no te olvides el bañador, que si no te arrepentirás como nosotros.

Lo de calorcito te lo decimos porque el agua que baja por aquí suele estar más bien fresquita. Pero si vas en verano seguro que agradeces el chapuzón en esta maravilla de sitio después de hacer la ruta del Vilameá 🔝.

10. El Muiño do Tenro, el final de la ruta del Vilameá

Después de flipar un rato con las pozas del Vilameá y el paisaje que deja el río a su paso por estos lugares, toca terminar el recorrido y volver al punto de partida.

El último de la ruta es el Muiño do Tenro, que está al ladito del primer molino que hemos visto, ¿te acuerdas de él? 🙄 Sí, el que estaba al ladito del primer puente.

Mapa con los Molinos de Vilameá

Como algunos molinos no tienen el nombre puesto en la puerta, hemos decidido hacerte un mapa con los 12 Molinos de Vilameá para que te sea más fácil encontrarlos todos. ¡Ahí va, amigui! 😎

¿Cómo llegar a la ruta de los Molinos de Vilameá?

A la ruta se llega por la carretera OU-312. Una vez llegues al pueblo de Vilameá solo tienes que coger un desvío que verás a mano izquierda ⬅️, en el que está señalizada la Ermita de la Virgen del Xurés ⛪. Pasarás al ladito de una capilla y sigue por el camino de la izquierda. Unos metros más adelante verás un sendero a la izquierda de la carretera en el que hay un cartel de la ruta. Si has venido en coche, este será el lugar en el que debes dejar tu coche, aunque avisamos de que no hay mucho hueco para aparcar 🅿️.

¿Qué hacer cerca de la ruta de los Molinos de Vilameá?

Ya que estás por la zona te recomendamos que veas algunas cositas molonas que hay cerca de Vilameá 📝. Uno de nuestros rincones favoritos lo tienes cerquita. Es la Ermita de la Virxen del Xurés, un lugar muy especial en el que además tienes unas vistas de escándalo 👀.

Cerca del sendero del Vilameá también te puedes dar un baño en unas termas más calentitas. Las Termas del río Caldo ♨️, en Os Baños, son una verdadera maravilla y el agua sale calentita. Tienes una zona pública en la que te puedes bañar, o si quieres algo con más servicios, puedes ir al balneario 🛁.

Muy cerquita de estas termas puedes ver dos sitios que tienen que ver con los romanos 🏺. Antes te hemos dicho que por aquí pasaba la Via Nova. Pues esta calzada romana tenía sitios para que descansaran los viajeros. Una especie de posada o fonda, pero ellos lo llamaban mansio. Una de ellas es Aquis Ogeresibus 🏡, que está muy cerquita de las Termas de río Caldo. La otra la encontrarás al lado del impresionante campamento militar romano de Aquis Querquennis ⚔️, en Porto Quintela, ya en Bande, pero merece mucho la pena que lo metas en tu lista de sitios que ver cerca de la ruta de los Molinos de Vilameá 👌.

Y si quieres seguir descubriendo esta zona, te recomendamos que eches un vistazo a nuestra sección de sitios que ver en Baixa Limia, en la que seguro que encuentras algún rinconcito más que te inspire para seguir disfrutando de esta maravilla de zona 😍.